Carlos Lescano era hace dos años sargento de la Gendarmería Nacional y trabajó en la frontera salteña, participando en operativos por tráfico de drogas, contrabando y hasta trata de personas.
En 2019 denunció hechos de corrupción en el escuadrón Salta, como el robo de mercaderías secuestrada de los depósitos de la propia Gendarmería. Pero su denuncia lo llevó a la ruina: fue desvinculado de la fuerza sin pagarle indemnización.
Recordemos que en Julio de 2019, se conocieron denuncias de otros oficiales de Gendarmería en relación a hechos de corrupción en los almacenes de esa fuerza.
El 22 de julio de ese año, la oficial Ana Paula Carabajal en servicio en el Escuadrón Chachapoya de Gendarmería denunció movimientos extraños en los galpones donde se guardan armas secuestradas con narcotráfico, narcóticos y contrabando en general. La oficial advirtió como un compañero había permitido que un vehículo se retirara del lugar sin identificarse, a pesar de haberle solicitado lo hiciera.
Luego, fue al galpón de secuestros y vio a personas de civil cargando mercadería en un auto."Venimos de parte de González", contó la oficial que respondieron. En esa oportunidad Carabajal solicitó la ayuda del jefe de guardia, sargento ayudante Ramón Héctor González, quien según la oficial, "se tomó un tiempo excesivo para acercarse al lugar".
Posteriomente Ramón González, jefe de guardia, se dio a la fuga cerca de las 4 de la mañana. Lo mismo sucedió con otros guardias que trabajaron esa noche, la fiscal auxiliar Paula Gallo Pulo inició actuaciones contra aquellos gendarmes.
La expulsión de Lescano
Su expulsión se produjo sin indemnización por despido terminó siendo justificada a partir de una serie de faltas al trabajo, informó el ex sargento Carlos Lescano.
Relató que al producirse su baja su familia fue hostigada y recibió amenazas. Aunque denunció el hostigamiento ante el Ministerio de Seguridad de la Nación, entonces a cargo de Patricia Bullrich, de nada sirvió, ya que los intentos de amedrentarlo continúan al día de hoy.
Lescano en una entrevista brindada al sitio Que Pasa Salta, se lamentó por haber denunciado los hechos de corrupción que presenció: “Por haber actuado como corresponde ahora me toca vivir esto”.
El ex sargento de Gendarmería recordó que: “El comandante principal que estaba a cargo, vendía las cosas de los secuestros que nosotros hacíamos en los propios vehículos institucionales, llevaba todo a su casa y ahí hacía las ventas”. Relató que ahora sobrevive ahora haciendo viajes en remis entre Salta y Ledesma (Jujuy), en donde reside.
Además informó que ahora Gendarmería pretende llevarlo a juicio militar aunque ya no revista en esa fuerza. Es por eso que reclama que su caso no quede en el olvido y demanda a las autoridades nacionales y provinciales que tomen las acciones necesarias para que se investiguen los casos de corrupción de Gendarmería en el norte salteño