Comenzó ayer el juicio contra el empresario estadounidense John Johnston, dueño del hotel El Castillo de Villa San Lorenzo, por la tentativa de femicidio de su ex pareja Laura Valdez. En la causa también está imputada como partícipe necesaria del delito María Eugenia González Enríquez, la posterior pareja de Johnston.
El 26 de Febrero de 2020, Johnston se encontró con Valdez y su pequeña hija en común en el hotel y restaurante, con el pretexto de entregarles útiles escolares. Pero luego comenzó a hostigarlas, molesto por la demanda por alimentos que su ex pareja había entablado 10 años antes.
“Te dije a vos que no me jodás con el juicio de alimentos. Sos una oportunista, andá a laburar”, amenazó Johnston.
Encolerizado porque esa demanda ya tenía una sentencia de ejecución, el estadounidense comenzó a atacar físicamente a la madre en presencia de su hija, agresión que contó con la complicidad de su nueva pareja María Eugenia González Henríquez.
En la audiencia de ayer, Laura Valdez relató que el estadounidense la tiró al suelo, le puso las rodillas en el estómago y en el pecho e intento asfixiarla. Ella perdió las fuerzas y entonces escuchó sirenas de la policía y alcanzó a ver las luces de los móviles
Logró salvarse gracias a que su hija pudo escapar y pidió ayuda a una tía. Antes de huir, la niña logró sacar con un celular una foto que hoy es prueba central en el juicio: el momento en que Johnston intenta asfixiar a Valdez.
John Johnston
La violencia de género no era nueva en la relación entre Johnston y Valdez. Laura había finalizado el vínculo 10 años antes, cuando el empresario norteamericano amenazara con tirar a la niña, una bebé de pocos meses en ese momento, por una ventana. La denuncia de ese ataque fue seguida por los reclamos de la cuota alimentaria.
El Foro de Mujeres denuncia el abandono a las madres por la justicia salteña
“Este caso de reclamo de la cuota alimentaria fue un disparador para llevar a una tentativa de homicidio que devela el retraso y abandono de la justicia hacia las madres que reclaman los derechos de sus hijos/as ante el sistema judicial”, expresó en un comunicado el Foro de Mujeres por la Igualdad de Oportunidades.
Irene Cari representante de ese espacio, declaró a Tiempo Argentino: “Las mujeres salteñas peregrinamos todos los días por los pasillos de los tribunales por la cuotas alimentarias y lamento aún el hecho de justificar el no cumplir con esta obligación del progenitor”.
Sostuvo que tanto el demandado como el propio estado, “responden con la violencia psicológica y física por tener que solicitarla, por reclamar un derecho de les niñeces”. En apoyo a la denuncia de la mujer violentada y en demanda de justicia, organizaciones feministas se concentraron ayer en la Ciudad Judicial salteña para acompañar a la madre denunciante.
Luego del intento de femicidio, Johnston y su pareja, María Eugenia González Henríquez, huyeron del país. Pero cuando regresaron quedaron imputados y con arresto domiciliario. Medida que luego fue revocada porque la justicia salteña consideró que no había peligro de fuga, pese al poder económico del denunciado y a las amenazas sufridas por Valdez tras llevar el caso a juicio.
Una justicia clasista y machista
Laura Valdez remarcó que la lentitud de la justicia en resolver la demanda por alimentos culminó en la situación de violencia que vivió junto a su hija en el restaurante de San Lorenzo.
“Hice más de 30 denuncias por maltrato y amenazas de muerte que la justicia no resolvió”, contó.
El juicio por alimentos salió favorable para la niña, remarcó su madre, pero Johnston nunca cumplió la sentencia, ni la justicia se encargó de hacerla cumplir
“Después de cuatro años de juicio, que no cumplió, se inició otro por ejecución de sentencia por los alimentos adeudados, pero la jueza se demoraba años en responder las apelaciones de las planillas que salían con los montos que tenía que pagar. Son 12 años de espera”, expresó a Nuevo Diario.
Los acusados se negaron a declarar:
Luego de la lectura del requerimiento a juicio, en la audiencia presidida por la jueza Gabriela González, se dio paso a la ronda de testimoniales, con la declaración de la mujer denunciante, un efectivo policial y un médico que intervinieron durante la investigación. La finalización del juicio se prevé para el próximo martes 8 de marzo.
Como ambos imputados se abstuvieron de declarar en la audiencia se dio lectura a las declaraciones brindadas por Jhonston y González Henríquez en sede de fiscalía.