Después de un año de idas y vueltas respecto al espacio que ocupan los feriantes del Parque San Martín, la municipalidad tomó una decisión drástica. Sin importar la Ordenanza 11125 impulsada por José García, donde autorizaba a los trabajadores a permanecer un año más en el predio, Romero decidió vetarla y deberán abandonar sus puestos de trabajo el 28 de febrero de 2023.
Según la intendenta, decidió estirar dos mese más el plazo: "para no interrumpir sus actividades comerciales durante las fiestas de fin de año y vacaciones". Sobre esto, el municipio anunció a través del decreto 123, que los trabajadores podrán ''gozar'' del permiso extraordinario porque cumplen las normas bajo las cuales se otorgó la autorización a través de la Ordenanza Nº 15.783.
Sobre los motivos, el Ejecutivo afirmó que existe: "una inconsistencia e imprecisión insalvable cuando refiere que la concesión se otorga a los vendedores de los locales comerciales actualmente emplazados allí"; agregando que el espacio público se encuentra ocupado por vendedores con concesión otorgada y vendedores sin autorización, considerados ilegales.
Además, alegaron que la Ordenanza incurre en un vicio grave, ya que no es competencia de ese organismo otorgar usos particularizados y diferenciados del espacio público sin especificar los beneficiarios de ello.
Respecto al veto, José García, impulsador de la Ordenanza, dijo que: “En la fecha en la que hemos sancionado esta Ordenanza, no llegaban a 70 las personas que estaban al día, y hoy son 123 las que sacan la cabeza y anhelan seguir trabajando”, lamentándose lo sucedido.