No fueron 30 mil. Fueron muchos más, el caso Andrawos - Moreno es un ejemplo evidente. La situación de esta pareja, demuestra uno de los tantos casos que seguramente quedaron en la memoria, solamente, de sus familiares. Las sobrinas de la pareja no quisieron que pasaran por alto como otros más.
Ni Elva ni Julio aparecían en las listas de víctimas del terrorismo de estado de los años 70'. Dos familiares decidieron llevar este caso a la justicia y sacar a la luz este crimen llevado a cabo en nuestra ciudad. De esta manera, presentaron el caso a la fiscalía federal de Salta.
La semana pasada, Carlos Amad, fiscal general, emitió acciónes legales para el ex comisario Joaquín Guil y el ex oficial de la POlicía Federal y ex guardiacárcel de la provincia, Juan Carlos Alzugaray. Los cargos fueron por secuestro y desaparición de Elva Andrawos y Julio Moreno.
En tanto, también se pidió las detenciones de ambos implicados, que al día de hoy, se encuentran cumpliendo condenas respectivamente, vinculadas a crímenes de lesa humanidad.
Finalmente, la fiscalía determinó que la pareja fue secuestrada en la ciudad de Salta entre el 22 y el 23 de junio del 75', por una serie de operativos que hizo la Delegación Salta de la Policía Federal y la Policía de Salta en esta provincia y Jujuy, buscando a una serie de personas vinculadas con el ERP.
Según se supo, la redada comenzó el 19 de junio. Esto desembocó con una detención de al menos 19 personas: entre ellas se encontraba Evangelina Botta de Nicolay, militante de ERP, detenida política asesinada en la Masacre de Palomitas en julio del 76', vinculada de manera estrecha con Elva.
En tanto, la pareja fue sorprendida por la patota al momento de llegar a un edificio de la calle Tucumán al 147, allí recidía su amiga anteriormente mencionada. Al momento de descender del taxi, fueron detenidos por el grupo delictivo. Aparentemente, Elva y Julio ya se encontraban en la mira de estas fuerzas.
Finalmente, la pareja fue llevada a la sede de la Federal. Allí fueron interrogados y torturados. Según la información recaudada, Elva murió por la misma tortura en esa Delegación. En cuanto al hombre, habría sido asesinado con explosivos en lejanías de la ciudad. Los cuerpos de ambos, fueron hallados camino a la cornisa de Jujuy.