En la misa por la celebración del Milagro que tuvo lugar en el Parque 20 de Febrero, el Arzobispo de Salta Mario Antonio Cargnello, se pronunció en contra de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.
Según el Arzobispo hay “una mentalidad antinatalista promovida por las políticas mundiales de salud reproductiva y por la falta de coherencia de legisladores que se profesan cristianos” y convocó a reglamentar la ley “para evitar los excesos que terminaron dejando a un bebé sin vida como ocurrió hace poco en el hospital de Tartagal”.
Cargnello instó a que se advierta las consecuencias “de la injusta ley del aborto”, y pidió reabrir el debate sobre la norma, sin tomar partido por ideologías o caso contrario que reglamenten la Ley para evitar supuestos excesos.
En su homilía, esa autoridad eclesiástica se refirió también a la situación de crisis que vive el país. “La crisis económica provoca un aumento grande en el número de los pobres y de los excluidos. La crisis social alimenta la grieta entre grupos que se enfrentan por ideologías. La crisis educativa, golpea generaciones de niños y jóvenes que quedan relegados en el camino de la educación. La crisis de la familia marca muchísimos niños que no alcanzan el oxígeno del amor pleno”, afirmó la principal autoridad de la iglesia católica en Salta.
El prelado en un rechazo a las nuevas formas en que se configuran las familias, se refirió a los hijos que no nacen en el contexto de un matrimonio.
“Permítanme destacar con el Papa la situación de la gran cantidad de niños que nacen fuera del matrimonio, que crecen sin la contención de papá y mamá."
Por otro lado se refirió al abuso sexual y pidió perdón por los casos que tuvieron lugar en "instituciones cristianas".
¿Qué decir de los niños explotados sexualmente o que, incluso en lugares en los que deberían ser contenidos sufren la humillante experiencia del abuso sexual, en la familia, escuelas, comunidades o instituciones cristianas? Perdón a los niños por ello”, expresó.
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