En su camioneta y con cinco balazos en la cabeza. Así encontraron a Darío Monges (40), que se habría desempeñado como colaborador en la política de Salta. La investigación presenta elementos que lo vinculan con el crimen organizado.
Es que en las últimas horas, se supo que la víctima se hizo pasar por abogado, para visitar en junio en la cárcel de Orán a Oscar "Cabezón" Diaz el sicario narco más temido de la provincia, que mataba para su suegro.
Monges fue hallado sin vida el sábado cerca del mediodía en el interior de una Ecosport estacionada en inmediaciones del barrio El Círculo, en la capital. Su cuerpo yacía sobre la butaca del conductor con cinco balazos en la cabeza.
Lo encontró un vecino que recorría la zona y se encontró con el sangriento crimen por lo que alertó al sistema de emergencias 911. Al llegar, la Policía actuó con perros rastreadores.
En la parte superior derecha del parabrisas delantero notaron la marca de un orificio de salida producto de los balazos que perpetraron contra Monges.
Del resultado preliminar de la autopsia, el fiscal penal González Miralpeix reveló que la víctima presentaba el rostro desfigurado y signos de violencia en sus prendas de vestir. Y dispuso el secreto de sumario en la causa por el homicidio.
También pidió estudios complementarios de la autopsia para determinar en forma fehaciente la data del fallecimiento y otros detalles. Uno de ellos, si fue asesinado en otro lugar y trasladado al lugar adonde fue hallado.
Fuentes investigativas citadas por El Tribuno señalaron que tenía vínculos con al actual intendente de la localidad de Vaqueros, Daniel Moreno.
Si bien el funcionario comunal afirmó que Monges no pertenecía a su gestión, dijo que lo conocía y se mostró consternado por el episodio: "Más que un compañero de trabajo era un amigo, es muy triste y lamento mucho lo ocurrido".
Monges trabajó y colaboró con Mario Moreno, hermano del intendente de Vaqueros y ex diputado provincial. El ex funcionario salteño fue pionero y director del programa Escuelas Municipales de Boxeo durante la gestión del ex intendente capitalino Miguel Isa.
La visita al temerario sicario
Oscar “Cabezón” Díaz, el temerario sicario que cobraba hasta 80 mil dólares por matar y tenía sello rojo de Interpol, cayó el 25 de mayo en Bolivia. De ahí fue trasladado al penal de Orán.
Estaba incomunicado aunque el 8 de junio recibió una visita. Pero fuera del horario establecido por el penitenciaría. Era Monges, quien se hizo pasar por abogado y en representación del Ministerio de Seguridad y Justicia de la Provincia. A su vez, dijo ser enviado por un funcionario de esa cartera.
El caso abrió una serie de interrogantes alrededor de importantes instituciones como el Servicio Penitenciario de Salta por lo que el actual ministro de Seguridad Abel Cornejo inició un sumario interno para determinar responsabilidades de la visita de Monges al penal de Orán.
También informó lo sucedido al procurador general de la Provincia, Pedro García Castiella, para que investigara lo ocurrido por lo que dio intervención a la fiscalía II de Orán.
Acusado de dos homicidios -entre ellos el del narco Marcelino Valdez Cari (un hombre implicado en el pago de una coima al ex juez federal de Orán Raúl Reinoso), “Cabezón” Díaz se hizo fama de violento en Salta por ser la fuerza de choque de su suegro, Ricardo Raúl "El Coya" Rojas (37), condenado a nueve años de cárcel por narco.
Díaz era la pareja de la hija de Sandra del Milagro Romero, alias “Alma Rubia”, esposa del "Coya". Rojas lo tenía como su principal asesino a sueldo.
Por sus servicios a la organización de su suegro, Díaz se ganó un pedido de captura y una circular roja de la Interpol por los delitos de "homicidio agravado por el uso de arma de fuego, asociación ilícita dedicada al contrabando de estupefacientes, agravado por la participación de dos o más personas organizadas, por la cantidad de estupefacientes y mercaderías".
Fuente: Clarín