En un contexto delicado respecto al futuro político y social de nuestro país, es de esperarse que las maniobras desesperadas desde la ultra derecha se acrecienten, si es que se puede, aún más. De esta manera, la situación de escasez de combustible podría ser la estrategia perfecta desde el sector petrolero por más que esto genere grandes problemas entre la población.
De esta manera, el actual ministro de Economía y candidato posicionado en primer lugar en las elecciones pasadas, se refirió a la situación y aseguró que: “Si el martes a las 12 de la noche no está resuelto el abastecimiento, desde el miércoles no van a poder sacar un solo barco de exportación. Primero, el petróleo es para los argentinos”; “les guste o no les guste a las petroleras, vamos a hacer crecer el cupo de biocombustibles, porque es clave para el crecimiento y abastecimiento y el cumplimiento de las metas ambientales de la Argentina”.
En medio de la tensión, surgió un nombre clave que habría sido el desencadenante de todo el conflicto: se trata de Gabriel Bornoroni, diputado cordobés electo por Libertad Avanza y actual presidente de la Federación de Expendedores de Combustibles y Afines del Centro de la República (Fecac).
Este personaje, apareció luego de que se conocieran los resultados que llevarían al balotaje a desarrollarse el próximo 19 de noviembre, y es a quien catalogaron como ''operador'' de la escasez de combustibles en el país debido a que forma parte de una "una sobredemanda generada por una expectativa de desabastecimiento".
En este sentido, según confirmaron, el propio Bornoroni impulsó la idea de que el precio de combustible para la venta al público ''tiene un atraso superior al 90%''; provocando que YPF sea la primera en quedarse sin stock debido a que posee el combustible más barato del mercado.