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¡Pensar que nunca habría pintado si mis piernas hubieran sido un poco más largas!”.
Toulouse-Lautrec.
Henri Marie Raymond de Toulouse-Lautrec-Monfa, pintor y cartelista, bohemio, 1,52 m.de altura, minusválido, alcohólico, ave nocturna, provocador, depresivo, sifilítico… Un aristócrata que se consideraba a sí mismo cronista social pintando al pueblo y a la noche de la belle epoque parisina, incluidas las prostitutas, que frecuentó y amó. En definitiva, uno de los mejores artistas del arte moderno francés.
Lautrec nació de la muy aristocráticaconsanguinidad de primos hermanos. Una enfermedad que se manifestó en su infancia afectó el desarrollo de los huesos y le impidió seguir creciendo más del metro y medio. Como el resto de su cuerpo se desarrolla con normalidad, su imagen es desproporcionada.
Rechazado por la alta sociedad, vio que en Montmartre podía vivir entre iguales y se fue a vivir a los burdeles del barrio más bohemio de París, frecuentando sus cabarets y codeándose con los artistas con más personalidad del XIX francés.
Su magnífica obra le debe mucho a la fotografía.La espontaneidad y el asombroso dinamismo de sus escenas y personajes hacen de sus dibujos excelentes apuntes del natural. Destacan también esos encuadres innovadores y los trazos rápidos y expresivos que definen a la perfección a personajes, situaciones y atmósferas. Despreciaba a los pintores de paisajes y de los impresionistas de la generación anterior, sólo respetó a Degas por su gusto similar por las bailarinas, el circo y los interiores.
Henri de Toulouse-Lautrec
Fue más que otra cosa un dibujante e ilustrador, tareas con las que pudo subsistir.al encargarle carteles los cabarets y espectáculos y demás publicidad. Sus óleos son escasos pero en ellos se puede ver el mismo gusto por los ambientes y personajes bohemios, la espontaneidad y el movimiento y los encuadres inusuales tomados de la fotografía y la estampa japonesa.
Lautrec fallecería en el recién nacido siglo a los 36 años de edad. La sífilis y eldelirium tremensdestrozaron su cuerpo y mente. Embriagado de absenta, llegó a disparar a las paredes de su casa creyendo que estaban llenas de arañas. Poco después fallecería en su cama. El Moulin Rouge, el Mirliton, el Moulin de la Galette o Le Chat Noir, perdieron a su mejor cliente y promotor